Paula Muñoz, de 57 años, fue sometida a una “cirugía en un día” en Centro Médico Bosques para corregir una tenosinovitis estenosante, comúnmente conocida como “dedo en gatillo”.
Paula ha trabajado muchos años en el área administrativa, lo que ha generado un desgaste físico a largo plazo. De a poco comenzó a sentir un malestar en su dedo pulgar derecho, el cual le impedía estirarlo por completo. La intensidad de la dolencia fue aumentando hasta ser intolerable.
“Fue un dolor horrible durante 5 meses. Me impedía realizar mi vida normal. Con la pandemia comencé a trabajar desde la casa y, con el mouse del computador, me pasaba a llevar el dedo varias veces. Lo pasé muy mal y en muchas oportunidades sentía que no podía tolerarlo”, comenta.
Le preocupaba mucho su independencia, ya que Paula es diestra y con su enfermedad no podía realizar cosas tan simples, como ducharse. Le costó adaptarse a usar la mano izquierda para cocinar o trabajar, por lo que no podía realizar su rutina con normalidad.
Fue así como llegó a la consulta del Dr. Sebastián González, traumatólogo de Clínica Ciudad del Mar, quien le diagnosticó tenosinovitis estenosante, patología que afecta a los tendones y poleas que flexionan los dedos de las manos. La solución que le dió el especialista fue una cirugía mayor ambulatoria, ya que su enfermedad estaba muy avanzada.
Paula añade: “Me operaron el 30 de junio en el Centro Médico Bosques. La cirugía fue en un solo día, lo que significó un alivio para mí, sobre todo porque estábamos en pandemia. Además, todo el equipo médico fue muy amable y cariñoso, en el postoperatorio me atendieron increíble”.
Lo que más valora Paula es que el doctor hizo un seguimiento muy personalizado, cercano y detallado de todo su proceso. En su recuperación no sintió ningún dolor. Al principio su mano estaba hinchada, pero con los días fue disminuyendo y evolucionando sin problemas.
“Hoy en día estoy súper bien, mi cicatriz no se nota nada, quedé muy contenta con el resultado, no me esperaba que todo fuera tan rápido y sin dolor. Si alguien sufre de esta enfermedad, por experiencia propia, les aconsejo que la traten a tiempo. Le doy muchas gracias al Dr. González por ayudarme. Volver a tener una vida normal ha sido impagable”, finaliza Paula.