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El prolapso genital es una enfermedad que afecta a mujeres y que consiste en el descenso de los órganos pelvianos femeninos, a través de la vagina. Esta patología es bastante común en el género femenino, sin embargo, no es un tema que suela abordarse como se debe.
El Dr. Luis Molina, Ginecólogo y miembro de la Unidad de Piso Pelviano de Clínica Ciudad del Mar, explica detalles de esta enfermedad y relata los tratamientos disponibles para enfrentarla.
Principales causas
Según el especialista, las causas que provocan el prolapso genital son variadas, siendo una de las más importantes el parto vaginal “dentro de esta causa también influye el número de hijos nacidos con este método y el peso de la guagua al nacer (mayores de 4 kilos)”.
Otros motivos que hacen más propensa esta enfermedad son la menopausia, la edad avanzada, el sobrepeso y la realización de actividades que involucren fuerzas físicas importantes.
El prolapso genital afecta de forma negativa la calidad de vida de las mujeres que lo padecen, así lo explica el Dr. Molina, quien señala que se ve perturbada la “sexualidad, generando Dispareunia (dolor en el acto sexual), acompañada de una sensación de pérdida de la femineidad”.
Además, ante grandes prolapsos y en casos menos frecuentes, es posible asociar trastornos defecatorios, incontinencia fecal y urinaria, retención de orina y problemas del vaciado de la vejiga.
Tratamientos
Pero esta molesta enfermedad cuenta con tratamientos actuales que permiten controlarla. El especialista de Clínica Ciudad del Mar, asegura que dependiendo de cómo afecte a la calidad de vida “es posible tratar el prolapso genital con ejercicios kinésicos o dispositivos de sostén, llamados pesarios vaginales. En los casos en que el prolapso está más avanzado y comienza a generar problemas importantes en la paciente, se da paso a la cirugía reconstructiva”.
El Dr. Luis Molina, finaliza recordando que “esta es una enfermedad crónica, que incluso si no se tienen los cuidados necesarios post cirugía, podría regresar”. Lo importante es que una vez diagnosticado el Prolapso Genital, sea controlado periódicamente para evitar su avance.
En cuanto a la prevención lo que se recomienda es evitar los factores de riesgo que favorecen su aparición: traumas asociados al parto y alzas de peso. Lo ideal es comenzar con terapias kinésicas de manera precoz.
