“Lo que aprendí de mi experiencia es que, ante cualquier síntoma o molestia, se debe consultar de inmediato a un profesional”

Cristina Maldonado, de 45 años, fue diagnosticada de cáncer de mama en etapa 4. Después de 3 años de tratamiento, sigue más fuerte que nunca asistiendo a su inmunoterapia. 

Comenzó sintiendo una molestia en la mama derecha, en enero de 2016, pero hace poco había nacido su hijo, por lo que asoció la incomodidad a la lactancia. Sin embargo, al poco tiempo, empezó a notar que la mama estaba deformada, no tenía buen aspecto y apareció un bulto grande. 

En octubre de ese año, le dolía también debajo del brazo. “En febrero de 2017  fui al ginecólogo, quien señaló que el bulto estaba muy duro, y me derivó para realizarme una mamografía y una ecografía mamaria. En estos exámenes apareció que tenía cáncer en las dos mamas en etapa 4, ramificado en hígado y huesos”, confiesa.

Fue así como llegó a Clínica Ciudad del Mar por GES, donde se atendió con la oncóloga Dra. Maríaelisa León y el ginecólogo Dr. Ignacio De la Torre, quienes según afirma Cristina, “desde un principio fueron unos médicos excelentes conmigo”. 

Su tratamiento se inició de inmediato y en marzo le extirparon los ovarios, ya que su cáncer es hormonodependiente. Según el Dr. De la Torre, este tipo de enfermedad consiste en que las células que han provocado el cáncer se ven estimuladas por la presencia de hormonas femeninas. “En algunas mujeres, cuando pese al tratamiento el cáncer vuelve a aparecer, se considera la extirpación de los ovarios para eliminar la fuente natural de estrógenos y contrarrestar el crecimiento del tumor”, explica.  

Cristina continuó con terapia y el 2020 se realizó un escáner (PET), el que arrojó que se había agrandado uno de los nódulos de sus mamas, lo que derivó que en ese mismo año le extirparan las dos mamas. Después de su recuperación comenzó con inmunoterapia y quimioterapia en el Centro Integral de Oncología. 

“En todo este proceso pude conocer y compartir con el equipo del Centro Integral de Oncología de Clínica Ciudad del Mar. Ellos son extraordinarios y ojalá todas las personas con cáncer pudieran acceder a una atención como la que me entregaron a mi”, comenta.

Hoy en día, Cristina se encuentra estable, ya terminó sus quimioterapias y está con inmunoterapia. Respecto a las medidas sanitarias aplicadas en la Clínica durante la pandemia, comenta: “Han sido muy cuidadosos  con los protocolos COVID-19, los doctores y todo el equipo de Oncología. Me parece muy bien que el personal esté vacunado, eso da seguridad para asistir a las terapias”.

Además, Cristina agrega: “Si algo aprendí de mi experiencia es que, ante cualquier síntoma o molestia, consultar de inmediato a su ginecólogo, no posponer controles y realizarse una vez al mes el examen de autopalpación de mamas”.