Los cuadros infecciosos virales y bacterianos, son algunas de las patologías que fácilmente se podrían evitar mediante el constante y adecuado lavado de manos. Un acto simple, casi mecánico, que incluso podría transformarse en la mejor campaña como medida de prevención. Así, el Dr. Werner Jensen, infectólogo de Clínica Ciudad del Mar, sostiene que esta es una práctica efectiva y fácil que se debe inculcar desde pequeños.
Las manos están en constante contacto con una gran cantidad de objetos y personas, quedando expuestos a microorganismos que pueden ser perjudiciales para la salud. De esta manera, cuando no se lavan las manos con agua y jabón, las bacterias, virus e incluso parásitos del ambiente, se pueden transmitir más fácilmente, ya sea por contacto directo o indirecto (Personas o superficies, respectivamente).
“El lavado de manos es una medida básica de limpieza, una barrera para evitar y controlar la propagación de agentes infecciosos. Es muy importante inculcar este hábito desde la niñez, de modo que se cree una rutina y conciencia precoz al respecto”, indica el infectólogo de Clínica Ciudad del Mar, Dr. Werner Jensen.
Higienizar las manos varias veces al día parece una práctica habitual, que todos tienen presente en su inconsciente colectivo, algo natural y totalmente obvio. Sin embargo, muchas veces este hábito no se realiza con la periodicidad que debiera para evitar enfermedades, sobre todo aquellas que llegan con el frío.
Cuidado con el invierno
Las patologías respiratorias son el principal problema de salud durante la temporada de otoño e invierno. Y es precisamente esa la realidad que vemos hoy: el Ministerio de Salud indicó que los contagios por virus ya superaron el peak del año pasado en un 5%, de modo que, para evitar más aumentos, decretaron una alerta sanitaria preventiva.
En este sentido, los niños, embarazadas, adultos mayores y enfermos crónicos, son los más vulnerables al contagio de enfermedades respiratorias, especialmente cuando son causadas por un saneamiento inadecuado y prácticas de higiene deficientes.
Según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), en el mundo mueren 3,5 millones de niños cada año por enfermedades infecciosas que incluyen, entre otras, hepatitis, tifus y neumonía, producto de la ausencia de una higiene básica. Respecto a los adultos, son casi 4,9 millones las defunciones asociadas a dichos factores. Si bien estas cifras son alarmantes, existen campañas a nivel internacional que apuntan a controlar y prevenir la propagación de este tipo de infecciones.
Práctica básica y fundamental
Lavarse las manos es un hábito de higiene personal muy importante, por lo que es fundamental que tanto niños como adultos sepan hacerlo bien y cuando corresponde. Esta medida ayuda a disminuir en un 50% la posibilidad de contagio ambiental, de acuerdo a datos de la OMS.
“Los padres cumplen un papel esencial en la incorporación de esta costumbre sencilla y útil a la vida diaria de los niños. Ellos deben enseñarles a sus hijos y dar el ejemplo, en primera instancia, explicándoles que al practicar esta pequeña rutina, se pueden lograr múltiples beneficios para la salud”, recuerda el infectólogo.
De acuerdo a lo señalado por el doctor Werner Jensen, de Clínica Ciudad del Mar, para lavarse las manos correctamente se debe usar agua y jabón, preferiblemente líquido.
“La higiene de manos debe comprender toda la superficie de éstas, incluyendo muñecas, palmas, dorso y dedos, así como también las uñas. Es importante frotarlas durante 40 a 60 segundos, enjuagar bien con abundante agua y secar con toallas desechables, en establecimientos hospitalarios”, puntualiza el especialista.
Además, agrega el infectólogo de Clínica Ciudad del Mar, “el alcohol gel es una alternativa adecuada, aunque no puede tomarse como un sustituto de una buena limpieza de manos, con agua y jabón. Esto, pues las preparaciones a base de alcohol reducen los microorganismos, pero no pueden eliminar la suciedad visible o la contaminación”.
El Dr. Werner Jensen es enfático en señalar que las manos deben mantenerse con las uñas cortas y limpias siempre, para facilitar la higiene y limpieza de manos.
Finalmente, el profesional de Clínica Ciudad del Mar señala que esta práctica es una medida básica de prevención de contagios asociados a la atención en Salud, demostrando una disminución importante en número de infecciones cuando mejora su implementación en los centros asistenciales.