Según el Ministerio de Salud, en Chile ha existido un aumento de enfermedades gastrointestinales, donde se ha registrado una mayor incidencia del cáncer de colon. Para diagnosticar o descartar estas patologías, la endoscopia es fundamental para obtener un resultado lo más certero posible.
Este análisis es una técnica de estudio digestivo poco invasiva y permite evaluar o descartar enfermedades benignas y malignas. Se divide en dos modalidades; endoscopia digestiva alta y baja. La primera, permite ver el tubo digestivo superior, donde se encuentra el esófago, estómago y duodeno. El segundo, más conocido como colonoscopia, es muy similar al examen anterior, pero en este caso se recorre todo el intestino grueso y en ocasiones, partes lejanas del intestino delgado, para visualizar estos segmentos del colon.
El Dr. Alex Díaz, gastroenterólogo de Clínica Ciudad del Mar, explica: “Para estos procedimientos, contamos con una moderna tecnología de equipo endoscópico, la cual otorga una visión del interior de los órganos de alta definición, gracias a técnicas de realce electrónica, lo que permite evaluar el aspecto y causa de la lesión, orientar sobre dónde biopsiar y descubrir si tiene aspecto benigno, sospechoso o maligno”.
Luego de realizar estos exámenes, se consigue una biopsia que es enviada al laboratorio, donde es analizada por un médico llamado anatomopatólogo, quien visualiza a través del microscopio si ciertas células de la muestra tienen algún aspecto específico.
“Todo paciente con sintomatología en la zona, que tenga más de 2 semanas de duración, se debe realizar la endoscopía alta o baja, también quienes tengan sospechas o antecedentes familiares de cánceres digestivos. Además, personas con reflujo, úlceras, enfermedad de Crohn, gastritis, entre otros. Lo más relevante es descartar patologías oncológicas, ya que a nivel mundial, el cáncer gástrico y de colon han incrementado de manera significativa”, agrega el especialista.
En la actualidad, con la modernización de las preparaciones para estos exámenes, no es necesaria una dieta muy estricta. Para la endoscopia alta se requiere un ayuno breve de 6 horas y toma de líquidos claros para que no tengan contenidos sólidos en el estómago, y con una buena preparación del paciente, el estudio tiene una duración de 10 a 20 minutos.
El Dr. Díaz añade: “En la colonoscopia, se receta un laxante específico, según las características de la persona, junto con una alimentación blanda en base a papillas o puré, sin ningún tipo de residuo vegetal o de fibra que pueda obstaculizar la limpieza del colon. Esto logra barrer la deposición en el órgano para tener la mejor visualización en el examen. Si la limpieza es adecuada, el examen puede durar entre 30 a 40 minutos, debido a que el intestino tiene una longitud de un metro aproximadamente”.
La sedación es consciente, no es una anestesia general como en el pabellón quirúrgico. Se utiliza la sedoanalgesia, donde el paciente queda semi o completamente dormido, sin dolor o molestias, con esto se aminoran las incomodidades que puedan ser generadas en el examen.
Si presentas alguna sospecha de patologías que afectan esta zona, no dudes en agendar con nuestros médicos expertos en gastroenterología. En Clínica Ciudad del Mar, contamos con el más completo y moderno equipo de endoscopía, especializados en la prevención, diagnóstico y tratamiento de estas enfermedades.