El viento, las lluvias y las bajas temperaturas, dan cuenta de la inminencia del invierno, época en donde suele creerse que es necesario ingerir más calorías. Por lo mismo es que muchas comidas más cálidas pueden provocar un aumento de peso indeseado. En este sentido, la nutricionista de Clínica Ciudad del Mar, Lilian Contreras, entrega algunas recomendaciones para lograr una dieta equilibrada durante esta estación del año.
Con la llegada de los meses más fríos, muchas personas cambian su vestimenta y se preocupan de abrigarse y protegerse de las bajas temperaturas. Con la alimentación ocurre lo mismo, el cuerpo trata de compensar y mantener su reserva de calorías y es así como el organismo hace un mayor esfuerzo para mantener su temperatura corporal. Por ello, es común ver a las personas comiendo más alimentos que generan sensación de bienestar y calidez, pero que tienen un gran aporte calórico.
Lilian Contreras, nutricionista de Clínica Ciudad del Mar, sostiene que el metabolismo basal, gasto energético en reposo, sí aumenta con la exposición a temperaturas muy frías, ya que requiere un poco más de energía para aumentar la temperatura corporal. Sin embargo, hay formas de compensar esto sin la necesidad de tener que consumir calorías vacías, grasas saturadas y azúcares, pues muy pocas personas realmente tienen un equilibrio entre lo consumido y lo gastado. Así, no sería necesario aumentar el consumo total de calorías de forma importante.
“Con el frío, las personas sienten que les aumenta el apetito, pero ello es sólo una sensación y no significa que se deba comer más. Ante esa creencia, se tiende a aumentar de peso en invierno, pues incrementan las ganas de comer, sobre todo carbohidratos y grasas saturadas”, explica la especialista.
Y es que en invierno hay ciertos alimentos que dan la sensación de no satisfacer o incluso de frío, como las frutas, verduras y ensaladas. Ante esto, Lilian Contreras recomienda mantener la misma selección de alimentos saludables, que aportan nutrientes y que mantienen el bienestar del organismo. “Durante esta época, se deben privilegiar las preparaciones culinarias de temperaturas templadas a calientes, ya que a nivel gástrico permiten mayor saciedad”, explica.
Asimismo, señala la profesional, para lograr una dieta equilibrada se deben preferir los guisos, tortillas, salteados de verduras y legumbres guisadas con verduras, cereales: arroz y fideos, ambos integrales. Además, se debe incorporar ½ a una porción de frutos secos a día, ya que son ricos en omega 3, fibras y proteínas. “Esto nos aporta calorías extras, pero no afectan a nuestra salud ni estado nutricional si se consumen en la medida justa”, indica.
La nutricionista de Clínica Ciudad del Mar asegura que “las vitaminas y minerales juegan un papel importante para fortalecer el organismo y por ello es que no se debe dejar de consumir frutas y verduras durante invierno”.
Otras recomendaciones a considerar son: