Después de las celebraciones, es común subir de peso. Dependiendo de cuántos días se festeje y cuánta comida sea ingerida, se pueden subir de 1 a 5 kilos.
Lilian Contreras, nutricionista de Clínica Ciudad del Mar, explica: “Habitualmente las personas incrementan en un 50% su ingesta de calorías en las Fiestas Patrias, es decir, duplica lo que come regularmente. Lo importante, es que la persona retome una rutina saludable después de las celebraciones para volver a su peso”.
Al excederse con la comida, el cuerpo comienza a retener líquidos y se generan mayores reservas de glucógeno por el alto consumo de carbohidratos. Al ingerir muchas proteínas, la digestión se vuelve lenta y esto produce sensación de pesadez.
La especialista indica que para recuperarse post Fiestas Patrias, es importante hidratarse, comer frutas y vegetales. También, volver a realizar actividad física y descansar adecuadamente. No se sugiere realizar dietas extremas ni medidas compensatorias, debido a que estas prácticas son poco saludables.
Condicionar al cuerpo a restricciones, provocará que el organismo no funcione bien. Es probable que se genere un circuito de comer grandes cantidades y después limitarlas, lo que condiciona que no se cubran los requerimientos básicos, sino un exceso de calorías y de nutrientes que el cuerpo no necesita.
Según la nutricionista, después del 18 de septiembre es ideal no consumir alimentos ultra procesados, puesto que tienen altas dosis de sal y grasas saturadas. A su vez, se recomienda bajar el aporte de azúcares simples y preferir productos integrales. Si se presenta algún problema digestivo, se debe reducir el consumo de carnes rojas por unos días para mejorar la tolerancia y la digestión de las proteínas. Es recomendable preferir pescados o proteínas de origen vegetal, evitar comidas que sean irritantes, además del alcohol y las bebidas gaseosas.
Por otra parte, es fundamental comer lento, masticar y disfrutar sin distracciones, ya que las señales de saciedad se demoran al menos 20 minutos en aparecer y, si se consume más de lo debido, se pueden generar problemas gastrointestinales como reflujo o malestares gástricos. La idea es disfrutar sin culpa, pero de manera consciente.
Lilian Contreras agrega: “Podemos tener una variación de peso, pero con el tiempo se tiene que ir regulando. Si frecuentemente se consumen más calorías de las que se gastan, existirá un desbalance energético. Cuando es solo por un tiempo específico y se retoma la alimentación habitual saludable, el promedio calórico bajará”.