Médicos Destacados CCdM: un reconocimiento al compromiso

El premio al “Médico Destacado 2014” (premiado en 2015), lo recibió el Dr. Luis Ignacio de la Torre, Gineco – Obtetra CCdM,  quien al ser consultado por el significado de este homenaje, nos comentó que “se trata de un notable reconocimiento que agradezco sinceramente, aunque considero que en esta institución hay médicos de mayor experiencia y trayectoria que lo pueden merecer más que yo. Este premio contribuye a afianzar los lazos entre los médicos y la clínica, potenciando el capital humano de la institución”. 

 

Respecto a su trayectoria en CCdM, el Dr. de la Torre señaló que “lo recuerdo bastante bien, pues ingresé a la clínica en diciembre de 2011, después de haber estado 3 meses con licencia médica por una fractura de pierna derecha que sufrí jugando fútbol en una liga amateur. Por lo mismo, llegué con muchas energías acumuladas producto del periodo de reposo obligado, que me permitieron incorporarme rápidamente al funcionamiento del Centro Médico y la clínica. Desde esa fecha he podido interactuar con muchos colaboradores CCdM que han facilitado mi labor gracias a su permanente compromiso y colaboración con la institución. Este reconocimiento es una buena oportunidad para agradecerles” concluyó.  

 

Por su parte, el Dr. Enzo Rivera, quien fue el primero en obtener por parte de CCdM el premio al “Médico Destacado 2013” (premiado en 2014), señaló que “fue un reconocimiento inesperado y que me llenó de orgullo. Para mí significa que la labor de uno como profesional ha tenido impacto en mi entorno y que la forma de trabajar y los principios que uno refleja son compartidos y valorados por el equipo de salud de la clínica”.

 

En cuanto a su ingreso a CCdM, el Dr. Rivera, Neurólogo,  señaló que “en un comienzo recuerdo que me llamaban para venir a atender pacientes en urgencia o por interconsultas. A veces tenía que salir de mi casa de madrugada o en pleno feriado. Después me pidieron informar exámenes de electroencefalografía, los que al principio eran muy pocos a la semana y se tomaban con un equipo antiguo en una salita estrecha y oscura. Pero lo que más costó fue dar comienzo al Centro de Estudios del Sueño cuando no había nada más que el deseo de hacer algo nuevo en la región y hubo que conformar el equipo completo, invertir en el equipamiento y habilitar la infraestructura de la clínica para hacer las polisomnografías, además de hacer cursos y charlas para interesar a los colegas y profesionales  CCdM. Gracias a Dios ese trabajo ya ha dado frutos, y estamos trabajando con los mejores estándares internacionales” finalizó.