Preguntas Frecuentes
· Cirugía oncológica: cabeza y cuello, mama, tórax, coloproctología y digestiva
· Oncólogos médicos
· Nutricionista Oncológica
· Psicología Oncológica
En Clínica Ciudad del Mar tenemos una amplia variedad de especialistas en cirugía oncológica. Además, en nuestro Centro Integral de Oncología se administran terapias sistémicas contra el cáncer, tales como quimioterapia, inmunoterapia, terapias biológicas y dirigidas.
También contamos con convenios para la realización de radioterapia, en caso de que se requiera.
Puedes realizarlo a través de nuestra página web o a través del call center (32 2451000).
Los tratamientos en nuestra institución, pueden contar con coberturas a través de los plazos garantizados en las patologías AUGE/GES, tanto para pacientes Fonasa derivados a Clínica Ciudad del Mar como segundo prestador, como pacientes con previsión Isapre en convenio con nosotros.
En el caso de los pacientes Isapre, además contamos con coberturas adicionales, como lo es La Cobertura Adicional para Enfermedades Catastróficas (CAEC), el cual es un beneficio adicional al plan de salud otorgado por algunas Isapres (Banmédica S.A., Vida Tres S.A., Consalud S.A., Colmena Golden Cross S.A.; Cruz Blanca S.A., Masvida S.A., Óptima S.A. y FUSAT), que permite financiar, cumplidos ciertos requisitos, hasta el 100% de los gastos derivados de atenciones de alto costo.
Para poder asesorarlo, contamos con un equipo de enfermería que lo orientará durante todo el proceso administrativo.
Si tengo sospecha de un cáncer, lo primero que debo hacer es acudir a una consulta médica con un especialista, según los síntomas que presente. Es muy importante mantener un control preventivo con su médico de cabecera.
Frente a síntomas persistentes, no dude en consultar de inmediato.
Si ya tengo diagnosticado un cáncer, debo acudir a consulta médica con un oncólogo.
Nos encontramos en el cuarto piso del Centro Médico Libertad, Av. Libertad 1133, Viña del Mar.
La oficina GES/ CAEC se encuentra ubicada en 13 ½ norte 655, Viña del Mar.
La posibilidad de llevar una vida normal durante el tratamiento depende del estado del paciente, de los síntomas que cause la propia enfermedad y de los efectos secundarios del tratamiento. Normalmente, la quimioterapia y la radioterapia se administran de forma ambulatoria, por lo que el paciente regresa a su domicilio tras finalizar el tratamiento.
En Clínica Ciudad del Mar, nos preocupamos por un enfoque integral durante la evolución de la enfermedad, buscando minimizar el impacto de esta en el diario vivir del paciente.
La duración total del tratamiento depende del tipo de cáncer que tenga y del estadio (qué tan avanzado se encuentre). Los tratamientos sistémicos se administran en ciclos de duración variable, con periodos de descansos entre cada ciclo, para permitir que su cuerpo se recupere de los fármacos administrados. Consulte a su médico tratante la cantidad total de ciclos que tiene indicado.
Los efectos secundarios de la quimioterapia no suelen aparecer hasta las 48 hrs de la administración del tratamiento. No obstante, se recomienda siempre a los pacientes que acudan acompañados a los tratamientos, ya que estos fármacos, no están exentos de efectos secundarios relacionados con la infusión de los medicamentos y muchos de ellos suponen largos periodos de administración, por lo que es normal que el paciente se sienta cansado tras la terapia.
En contexto de pandemia, los acompañantes no pueden ingresar a la sala de terapias del Centro Integral de Oncología, a excepción de pacientes con necesidades especiales, pero pueden esperar en la sala de espera del 4 piso del Centro Médico Libertad.
Durante o al finalizar el tratamiento, su médico tratante le solicitará exámenes de laboratorio y pruebas de imágenes (TAC, PET, Resonancia Magnética, otros) que permitirán ver la evolución de la enfermedad. Estas imágenes se comparan con las pruebas realizadas antes del tratamiento y ayudan a evaluar la respuesta al mismo.
Es esperable que se pase por diferentes fases, dependiendo de cada persona. Las reacciones suelen ser un “shock inicial”, que se caracteriza por sentimientos de vulnerabilidad, pérdida, confusión, inseguridad y fragilidad. También puede aparecer negación o incredulidad, tristeza, llanto, impotencia, miedo e incluso rabia. Además, ocurre que muchas personas otorgan sentido a la experiencia, logrando alivio y aceptación de la enfermedad.
Es importante poder acompañar su proceso con un profesional especialista (psicólogo), quien realizará acompañamiento y en caso de requerirse, tratamiento psicológico.
Sí, pero antes de administrar cualquier vacuna, debe primero consultar con su médico tratante (oncólogo).
Las tinturas para el pelo contienen químicos que pueden dañar el cabello. No existen estudios que demuestren que el tinte del cabello cause más daño después de haber administrado un tratamiento de quimioterapia. Sin embargo, se recomienda no teñirlo hasta pasado dos meses de haber finalizado el tratamiento.
Para el cuidado del pelo se recomienda utilizar un champú suave y evitar los tintes que contengan amoníaco.
Es importante notificarle al médico oncólogo todos los tratamientos y/o medicamentos que estoy tomando, ya que pueden interactuar con el tratamiento oncológico y perder su efecto o generar efectos secundarios. Es recomendable elaborar una lista con los medicamentos, incluyendo el nombre, dosis, hora, duración del tratamiento y por qué se lo indicaron.
Una vez en tratamiento oncológico, se debe consultar con su médico tratante antes de tomar un nuevo medicamento.
Para que los tratamientos oncológicos sean efectivos, es importante realizarlos con la frecuencia indicada por su oncólogo. Si usted falta a alguna sesión, debe consultar inmediatamente con su médico tratante para reagendar su sesión.
Sí, pero antes de viajar, debe consultar con su médico tratante (oncólogo). Importante coordinar los tiempos para no perder su ciclo de tratamiento. En contexto de pandemia, deberá considerar la utilización de todos los elementos de protección personal para evitar un contagio de COVID-19.
Las terapias alternativas, integrativas o complementarias, como en el caso de la homeopatía, acupuntura, técnicas de relajación, masajes, reiki, entre otros pueden tener un efecto muy beneficioso como ayuda frente a los síntomas derivados de la enfermedad o el tratamiento. Se recomienda consultar con el médico tratante en caso de tomar tratamientos orales complementarios, ya que algunos de ellos pueden interaccionar con el tratamiento contra el cáncer.
Sí, realizar algún tipo de actividad física puede disminuir los efectos secundarios del tratamiento contra el cáncer. Hacer ejercicio puede: aliviar las náuseas durante la quimioterapia; mejorar el flujo sanguíneo a las piernas, y en consecuencia, disminuir el riesgo de tener coágulos; aliviar el estreñimiento; revitalizar el deseo sexual; mitigar la fatiga causada por los tratamientos y mejorar el insomnio.
Es posible que su médico le indique por un periodo de tiempo consumir alimentos cocidos, para así evitar infecciones gastrointestinales.
Hasta el momento, no existe evidencia científica respecto a una “dieta” especial para el paciente con cáncer, por lo que se recomienda llevar una alimentación saludable con énfasis en lo de origen vegetal como las legumbres, frutas, verduras, pescados, entre otros y eliminar o bajar el consumo de alimentos procesados.
En general, se recomienda no consumir alimentos preparados en lugares públicos que no le den seguridad. Prefiera aquellos en que conozca su procedencia y tipo de preparación.
Durante su tratamiento con quimioterapia se le solicitará no consumir mariscos (ni crudos ni cocidos), debido al riesgo de contraer alguna infección gastrointestinal. Tampoco podrá ingerir pomelo, dado que puede interactuar con el tratamiento oncológico.
Es importante poder acompañar su proceso con un profesional especialista (nutricionista oncológico), quien realizará un seguimiento personalizado según su caso en particular.
A modo general, un paciente en tratamiento oncológico debe acudir a urgencias en las siguientes situaciones:
· Fiebre axilar mayor o igual 38ºC persistente
· Dolor intenso
· Diarrea que no ceda con tratamiento indicado
· Vómitos persistentes que imposibilitan ingesta de líquidos
· Compromiso de conciencia
· Deterioro importante del estado general
· Sangrados importantes (nariz, orina, deposiciones, otros)
Es importante que si acude al servicio de urgencias, debe informarle al médico que lo atenderá su diagnóstico y tratamientos que se encuentra recibiendo, además de deberá notificar a su equipo médico tratante.
No se realice tratamientos dentales mientras esté en tratamiento oncológico, sin previa autorización de su médico tratante.
Sí, puede estar con mascotas, siempre y cuando mantenga sus controles veterinarios al día.
Se sugiere limitar las visitas, procurando que las personas con quien tiene contacto se encuentren sin evidencia de una enfermedad infecciosa activa.
Siempre que el estado general del paciente lo permita, se pueden mantener relaciones sexuales. Es importante recordar que se deben tomar medidas de protección para evitar el embarazo durante el tratamiento.
Pueden haber disfunción sexual o disminución del libido, generalmente transitorias.
Lo primero es reconocer y aceptar las emociones, pensamientos y preocupaciones. El hecho de evadir las propias reacciones no ayudará a sentirse mejor, por el contrario, puede llevar a pensamientos poco racionales que sólo generan mayor preocupación y malestar. Compartir emociones con personas cercanas ayuda a enfrentarse al propio malestar y suele resultar en alivio, claridad de propios sentimientos y facilita recibir ayuda. También sirve de ayuda realizar ejercicios de respiración y relajación, o la actividad física como caminar al aire libre.
Por último, es muy importante regular la cantidad y calidad de información. Además debe seguir las recomendaciones del equipo médico tratante.