Algunas de estas células pueden desprenderse y viajar a otros órganos, provocando una enfermedad a distancia (metástasis) en diferentes partes del cuerpo.
La próstata es un órgano masculino ubicado en la pelvis profunda, con apariencia en forma de nuez o castaña. Tiene un volumen aproximado de 15-20 cc.
Se encuentra situado bajo la vejiga y sobre el músculo esfínter urinario externo. A través de la próstata transcurre la uretra, estructura tubular por donde la orina es conducida desde la vejiga hacia el exterior. Además, en el espesor prostático viajan los conductos eyaculadores, los cuales comunican los conductos deferentes y vesículas seminales con la uretra, permitiendo así la salida del líquido seminal.
En la cara posterior de la próstata se encuentra el recto, motivo por el cual parte importante de la búsqueda de cáncer prostático es mediante el examen de tacto rectal.
Es un órgano glandular, por lo que es capaz de secretar fluidos con un importante rol en la reproducción y fertilidad masculina. La secreción que genera este órgano, constituye cerca de un 30% del total del líquido seminal y es rico en nutrientes y glicoproteínas, entre ellas el antígeno prostático específico, cuya función es la dilución del coágulo seminal, permitiendo la movilización de los espermios hacia la cavidad uterina, una vez ocurrida la eyaculación.